El vuelo que excede el ala

“suponiendo absurdos así, que en la zona y en ese momento pudieran ocurrir cosas semejantes, habría que preguntarse si tiene sentido el que estén ahí esperando que empieces a contar, que en todo caso alguien empiece a contar, y si el buñuelo de banana en el que está pensando Feuille Morte no reemplazaría harto mejor esa vaga expectativa de los que te rodean en la zona, indiferentes y obstinados a la vez, exigentes y burlones como vos mismo con ellos cuando te toca a vos escucharlos o verlos vivir sabiendo que todo eso viene de otra parte o se va quién sabe adónde, y que por eso mismo es lo que cuenta para casi todos ellos”
Julio Cortázar

Oigo al que se va, sin su música, sin sus nombres, sin despedida.

Y así, qué más que estarse con los brazos caídos y el corazón amontonado

Acaso porque el vuelo desborda siempre a las alas, esa suerte de sustitutos tuyos continuarán en la zona, sanos y salvos, firmes, doblando, multiplicando y volviendo a duplicar en el éter el inevitable chorrear de tus bis-bises.

Gracias, Hernán.